lunes, 18 de febrero de 2013

14." Invasión romántica"

Liam

Seguí hablando con ella un rato más. Era muy simpática, y no era nuestra fan, así que no se ponía histérica como las demás.
- Los típicos como los Beatles, Queen, Rolling Stones... Offspring, Guns n' Roses...- continuó explicando.
- Así que prefieres a unos viejos que a nosotros...- bromeé. Ella rió.
- No es que vuestra música no me guste... Simplemente, prefiero otra.- se encogió de hombros y decidí dejar el tema. La verdad, no sabía muy bien que hacer, seguir hablando con ella, despedirme, pedirle el teléfono... Siempre había sido muy tímido, y eso no mejoraba las cosas. La miré un poco nervioso. Niall me llamó por detrás.
- Bueno, será mejor que me valla..- se rascó la nuca.
- Si, pero primero... Podrías darme tu número, o bueno, yo el mío, ya sabes...- me había quedado sin palabras. Ella sonrió. Me cogió el móvil del bolsillo y sin más escribió su número. Hizo un gesto con la mano y se marchó.
- Vaya, qué fácil.- comentó Niall mientras se acercaba, que había visto la escena desde lejos.- No deberías ser tan tímido.
- Mira quien fue a hablar.- le reproché, un poco enfadado. Me me dio unas palmadas en el hombro.
- Ay, Liam, cuanto tienes que aprender.- lo miré confuso. Sonrió y no me dio más explicaciones. Que chico más extraño.

Rachel

Nada más llegar a casa me tiré en cama. Había tenido clase toda la tarde, eran sobre las ocho y estaba medio muerta. Menos mal que era viernes. Justo al sentarme sonó el teléfono. Resoplé y lo cogí sin mirar el número.
- Hola.- contesté con desgana.
- ¡Hola!- dijo una voz alegre que reconocí al instante. Sonreí.- ¿Te molesto?
- No, no, no...- negué con mi cabeza, aún sabiendo que no me veía.-¿Qué pasa?
- Bueno... Lo primero, ¿tienes planes para ahora?- preguntó Niall.
- Eh, no…- en realidad tenía pensado dormir, pero no lo iba a rechazar.
-¿Te gustaría venir conmigo al cine?- dijo rápido. Sonreí ligeramente.
- Claro, por qué no.- se oyó una risita al otro lado del teléfono.
- Bien, pues estaré allí... A las nueve menos cuarto, si me dices tu dirección, claro.- se la dije mientras jugaba con un mechón de pelo.- Perfecto, pues en un ratito estoy ahí...
- Hasta ahora.- me despedí y me puse a dar saltitos por mi habitación. ¡Niall Horan! Como para no estar contenta. No lo conocía prácticamente, pero me hacia mucha ilusión. Corrí a la ducha y me bañé en un tiempo récord para mí. Con una toalla aún en la cabeza, me puse delante del armario. Como siempre, un montón de ropa pero nunca la adecuada. Resoplé una vez más apoyada en la cama. No hacia mucho frío para estar en Londres, daban un poquito de lluvia y sin viento... Al final escogí unos pantalones verdes con una camisa suelta pero que abrigaba azul con una bufanda y botines marrones. Sequé el pelo lo mejor que pude y lo dejé liso como siempre, aunque la verdad ese día estaba rebelde. No me maquillé mucho, no me gustaba ir como un cuadro por ahí. Rímel, raya, brillo y punto. Miré el reloj. Nueve menos veinte. No sabía si era puntual o impuntual, pero aún así bajé en ese momento. Mi madre estaba en la cocina y mi hermana en el salón. Mierda, no se lo había dicho. ¿Y si no me dejaba? Era un chico y mi madre siempre decía que los hombres de mi edad eran unos guarros. Y si aún encima le decía que apenas lo conocía y que era famoso, ni en sueños. Busqué una excusa rápido, pues mi madre ya me miraba pidiendo explicaciones.
- Voy al cine.- dije sin más.
-¿Con el permiso de quien?- preguntó. Siempre la misma pregunta.
- Espero que con el tuyo.- le puse una de mis caras de gatito con las que se me quedó mirando.
- Es tarde.
- Venga, por una noche que salgo... Mamá, soy mayor ya, además, volveré pronto.- "o eso espero" añadí en mi mente.
-¿Con quien vas?- Oh no. La mala pregunta.
- Con unas amigas de la universidad.- mentí.- Nos tocó hacer un trabajo juntas y, como nos llevábamos bien decidimos quedar...- me miró con desconfianza. Esperaba que le colara.
- Bueno, siempre que vengas antes de las doce me vale. - le sonreí justo cuando sonó la bocina del coche. Ya estaba en la puerta cuando me gritó.- Aviso, si llegas a las doce y un minuto, castigada.- asentí. Ya sabía que no me iba a castigar hasta que llegase a las cinco, pero siempre decía lo mismo. Cerré la puerta sin pensar más en eso y me dirigí al coche.

Alicia

-¡Ya está aquí tu novio!- oí la voz de Louis poniendo burla en la última palabra. Resoplé mientras bajaba por las escaleras pasando por su lado sin hacerle caso. Me miré una vez en el espejo antes de abrir. Ahí estaba, con su habitual sonrisa. Le di un pequeño beso antes de salir del campo de visión de Lou cerrando la puerta tras de mí.
-¿Y que tienes planeado, caballero?- pregunté cogiéndolo del gancho como los ancianos.
- Cena romántica, paseo romántico y invasión extraterrestre romántica. - me reí. Siempre había sido muy friki, y lo seguía siendo.
- Creo que paso de la invasión extraterrestre.
- Es una invasión romántica. Los alienígenas vienen con ramos de flores y bombones. Es tentador.- ambos reímos.
- Te prefiero a ti que a un ovni. - levantó una ceja antes de besarme otra vez. Luego me cogió de la mano y empezamos a caminar.
-¿Tu hermano es famoso?- preguntó de pronto. La verdad, no me lo esperaba.
- Se puede decir que si.- no le quise dar más importancia.-¿Por qué?
- Me pareció verlo en una revista de mi prima, tiene un grupo con otros cuatro, ¿no?- asentí.- Menos mal que estoy saliendo contigo, si no pensaría que te gusta alguno de ellos.- rió. Yo no pide hacer otra cosa que sonreír. Bum. A mi mente vinieron cientos de fotos de Harry de golpe. Genial, justo cuando trataba de ignorarlo me venía ahora George con eso. Pero no tenía la culpa, él que sabe...
- Para eso ya te tengo a ti.- respondí mirando al suelo. Noté como sonreía mientras me cogía la mano, pero yo me sentía un poco culpable. A quien iba a engañar, mucho antes de conocer a los chicos me encantaba Harry, y eso aún no había cambiado.

Lilly

Caminé un rato más antes de verlo. Mierda, mierda, mierda, mierda... Me escurrí hacía un lado, deseando que no me viera. Estaba ya muy cerca de mi, con sus amigos, riéndose. No me había visto, así que me deslicé a una cafetería que estaba prácticamente al lado. Me senté en una mesa lejos de las ventanas, pero aún así yo podía ver a Ryan y los suyos sentados en el muro junto a un parque. Suspiré y pedí un café cualquiera, no presté mucha atención a cuál. No podía salir hasta que se marchase, si no me iba a ver y ya empezaría con sus burlas y, probablemente, otras cosas... Llegó el café que por desgracia se me acabó pronto.
Un rato más pasé allí hasta que una camarera me dijo que si no pedía nada me tendría que marchar. No me apetecía tomar más, además ya se habían alejado lo suficiente para no verme. Pagué y salí de allí, yendo hacia la derecha, al lado contrario. Puse música en el móvil con los cascos, relajándome.
- Vaya, ¿creías que no te había visto?- su rasposa voz. Caminé más rápido. - Preciosa, sabes que te puedo alcanzar si quiero. - me cogió del brazo bruscamente.
-¿Qué quieres?- pregunté seca.
-¿Quien era ese chico del otro día? Si, el famoso ese...- puso un tono de desprecio en su voz que no me gustó nada.
- Un amigo, ¿vale?- me solté y volví a caminar. Me agarró de la cintura casi pegándome a él, por lo que puse cara de asco.
- No te creo.- me apretó el brazo hasta el punto de hacerme quejarme.- Por mentirosa te vienes conmigo.- me arrastró a su lado. Empezaba a tener miedo, sus amigos se habían ido, cosa rara. Intenté soltarme pero nada. Cada vez me llevaba más lejos sin saber muy bien a donde. Justo ese día, cuando normalmente las calles estaban llenas, no había nadie que me oyera.

Rachel 

Llegamos al cine sobre las nueve. Cogimos entradas para una peli de miedo. Nunca me habían gustado las películas románticas, así que mejor para los dos. Compramos palo,tías y demás mientras hablábamos. Era muy simpático, había que decirlo. Al entrar en la sala nos sentamos casi al final. La película empezaba bastante aburrida, así que me dedique a comer regaliz. Intenté meter la mano en el cubo de palomitas pero no me dejo.
- No, son mis palomitas.- decía mientras yo intentaba cogerlas.- Ñam, qué ricas..- reí y lo intenté una vez más hasta que creí conseguirlo. Oí que soltaba un quejido.
- Oh, no, no me digas qu he tocado...- le dije tapándose la cara con las manos.
- Si, lo has tocado.- rió.
- Oh, lo siento..- creo que no podía estar más roja.
- No pasa nada..- en su voz no oí rencor, si no diversión.¿qué lle parecía divertido de aquello?

_____________________________ HOOOOOOOOOLA. Aquí capítulo new, jeje. Es un poquito más largo que los demás, y he subido pronto, así que espero que no os quejéis de mucho ;) Lo principal es que os guste. Así que espero que comentéis y eso, ejem, ejem...
Por cierto, ¿alguna de vosotras tiene el Link de Dark? Es que me han dicho que está muy bien... A poder ser, en español. Pero si no lo tenéis, o lo tenéis en inglés, ponérmelo igual :3
MUCHÍSIMAS GRACIS

2 comentarios:

  1. jahsdfbvhjsgdvbgjhsbvhjsvbhbgshjrfbds Liam me encanta ahí tan timido *-*
    La verdad es que hoy no sé qué más decirte, no estoy muy creativa -.- Así que solo diré que espero que subas prontito el siguiente. Un beso <3

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    1. A mi también ;) asiqqpñdmsloqkd
      No pasa nada, con que leas me basta ;)

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